La semana pasada participamos en la dinámica "Vámonos de viaje", que consistió en elegir uno de cuatro destinos turísticos, dando respuesta a tres preguntas: ¿Qué
idea o emoción te provoca esta imagen?
¿Por
qué irías a este lugar? ¿Qué
esperas encontrar ahí?
De 13 turistas participantes, se eligieron tres destinos diferentes:
PLAYA, BOSQUE Y DESIERTO.
El destino más visitado será el BOSQUE (por 7 personas). Estos turistas buscan en el destino elegido la paz, la tranquilidad, el encuentro con Dios, con la majestuosidad de la naturaleza y la vida.
El segundo destino más visitado será la PLAYA (5 personas). Estas personas irán en busca de la paz, la tranquilidad, el descanso, el encuentro consigo mismo, y con Dios y su creación, ante la cual se sienten humildes.
El último destino pero no menos importante, tendrá un solo turista aventurero que va en busca de la humildad ante la creación, la paz, el encuentro con la naturaleza y la reflexión personal.
Como se habrán percatado, aunque son destinos diferentes, los tres equipos buscan prácticamente lo mismo. A veces no nos percatamos de los aspectos que tenemos en común. Parece que todos anhelamos PAZ, TRANQUILIDAD, DESCANSO, SENTIRNOS CERCA DE DIOS Y DE LA NATURALEZA, APRECIAR LA GRANDEZA DE LA CREACIÓN Y SENTIRNOS AGRADECIDOS, HUMILDES, PLENOS Y VIVOS. DESCONECTARNOS DEL DÍA A DÍA PARA REFLEXIONAR Y REENCONTRARNOS A NOSOTROS MISMOS. Y para ello, nada mejor que salir del bullicio de la ciudad, pues nadie ha elegido como destino una gran urbe.