viernes, 29 de abril de 2016

CINE CLUB: Duelo de Titanes

Hoy asistimos a la función de Cine Club, para disfrutar de "Duelo de Titanes". La película nos llevó a reflexionar sobre aquello que de manera absurda separa al hombre, como el color de la piel. 
Los personajes nos hablan de solidaridad, de trabajo en equipo, de amistad, de humildad, de creer en el otro y apoyarlo. Nos invitan a creer que caminando unidos, en armonía, con auténtico amor al otro, todo es posible.




miércoles, 27 de abril de 2016

CLUB DE LECTURA: "Libertad y aceptación"

El 26 de abril nos reunimos para comentar un fragmento del libro “LA LIBERTAD INTERIOR”, de JACQUES PHILIPPE. Este fragmento lleva por título “Libertad y aceptación". ¿Qué es la libertad?, ¿qué no es? ¿Libertad para qué? ¿Cómo se relaciona la libertad con la felicidad? El texto nos invita a encontrar la respuesta a éstas y otras preguntas.

Algunos de los aprendizajes que nos dejó esta lectura:

Adriana: Entender que de ti depende ser feliz o no. Elegir cómo quieres estar día con día.
Deli: No todos los días son buenos, debemos aceptarlo y elegir qué tanto te afecta o no.
Lety: Me invitó a replantearme el fin de estar en la Universidad. La actitud que transmito día a día en el trabajo. El fin de lo que hago.
Edith: Debemos hacer "travesuras" afectivas, amorosas, con las personas que nos rodean. Cambia el clima de trabajo y la actitud de las personas.
Humberto: Me llevo la tarea de identificar aquellos aspectos que no me hacen libre ni ser feliz.
Vicky: Hay que conocer nuestras limitaciones y trabajar en ellas.
Paty: Nacemos libres, es un acto de voluntad mantener y potenciar esa libertad.

Les compartimos las fotos de la sesión:








¡Y así cerramos!


¡Excelente sesión! Nuestro Club crece. 

lunes, 25 de abril de 2016

Mensaje para reflexionar: DIOS DE AMOR Y UNIÓN, NO DE GUERRA Y MUERTE

Muy probablemente todos hemos escuchado cada vez con mayor frecuencia, noticias sobre la guerra que el llamado “Estado Islámico” o ISIS, ha declarado a varios países.

“Como parte de su interpretación extremista del Corán, han ordenado la expulsión de todos los cristianos que se nieguen a convertirse al Islam. Incluso, se han denunciado decapitaciones masivas de cristianos en público.
El autonombrado Estado Islámico es un grupo insurgente, islamista-suní, creado en 2003 para enfrentar a la tropas de Estados Unidos en Irak. En un principio estuvo ligado a Al Qaeda (de Osama Bin Laden), pero en 2013 se separó para convertirse en uno de los principales grupos armados en Irak y Siria, donde controla una importante parte del territorio desde que explotó la guerra civil en dicho país.
La nueva organización es una especie de protoestado que se caracteriza por una ortodoxa interpretación del Islam, sus acciones violentas contra los chiítas (rama del Islam disidente) y por su objetivo declarado de expandirse por Jordania, Israel, Palestina, Líbano, Kuwait, Turquía y Chipre. Así como crece su influencia, crece la indignación mundial contra sus actos, como ocurrió tras los recientes atentados en Francia (1)”.
Estamos frente a un grupo terrorista y fanático que pretende “convertir” al Islam a base de amenazas y muerte. ¿Podría Dios desear la masacre, la desunión, el desamor entre los hombres? ¿Podría Dios estar detrás de este movimiento?

El Papa Francisco promueve el diálogo interreligioso, porque independientemente de la religión que se profese, y aun si no profesas ninguna, todos somos hijos de Dios. Un Dios de amor, un Dios misericordioso no promueve el odio y la muerte.

Te invitamos a ver este video breve del Papa Francisco, respecto al diálogo y el respeto interreligioso: https://www.youtube.com/watch?v=qT9SPmX0wj8.

¡Compártenos tu opinión!





REFLEXIONES

Emilio Dávalos:

Aunque conozco poco de este tema, podría decir que es una mala interpretación de las escrituras. No soy experto en el Islam, ni del tema en particular, pero si he escuchado comentarios de amigos que han ido a platicas de expertos en este tema y es muy común que pase esto en diferentes niveles. Por otra parte, está demostrado que aunque una persona promedio le puede llegar a costar mucho trabajo quitarle la vida a otra, esta carga moral se aligera enormemente cuando esta tarea forman parte de sus deberes, como en los militares o policías o convicciones religiosas.

Miguel Ángel Sánchez:


Ciertamente a lo largo de la historia el mundo ha enfrentado grandes guerras en nombre de dios" las cuales pueden equivocadamente tener esta razón y aun más ocultar otras razones como el expansionismo, comerciales etc.
Dios representa el amor, nunca la violencia un amor que no solo debe ser visto en grupo, individualmente el e dios debe reflejarse en cada uno de nosotros para que en nuestro pequeño mundo actuemos en congruencia; el amor a los integrantes de nuestra familia, a nuestros compañeros de trabajo y especialmente a nosotros mismos es algo que debemos tener presente y siempre vivo.
Debemos Informarnos, de estos grupos, de fanatismos que agrupan, de las ideas equivocadas para entender y combatir desde nuestra trinchera, evitar que los adolescentes que nos rodean se mal informen y lleguen a pensar equivocadamente que la guerra en nombre de Dios está justificada. 

Maru Hernández:


Me impactó mucho lo que dice el Papa: “Todos somos hijos de DIOS” y luego las frases “Creo en el amor”.
Decirlo es muy fácil, pero todos los días de nuestras vidas tenemos que cuestionarnos si estamos actuando con amor, y con amor estamos respondiendo a nuestro prójimo… lo difícil: hacerlo, no decirlo.
Estoy de acuerdo con lo que dice Miguel Angel, debemos informarnos antes que cualquier cosa, y estar abiertos a escuchar y abiertos a comprender, antes de estar prestos a juzgar.

Gracias por el espacio para la reflexión.

Fabs:

Es maravillosa la apertura de la Iglesia Católica al diálogo interreligioso en las últimas décadas. “Muchos… buscan a Dios o encuentran a Dios de diferente manera… hay una sola certeza que tenemos para todo: Todos somos hijos de Dios”. Dialogar promueve la paz, el respeto a las creencias de todos, lo que no significa renunciar a la difusión del mensaje de Cristo como el mensaje de salvación.

Luis Manuel: 


Creo en el amor, creo que todos somos hijos de Dios, pero como bien se dijo abajo, lo difícil es aplicar a nuestra vida diaria la filosofía de dar amor, en nuestro trabajo, a las personas que tratamos diariamente e incluso, tratarnos con amor a nosotros mismos. Respetarnos unos a otros también es una manifestación de amor, así como la honestidad y la congruencia. Abramos nuestras mentes y corazones a todo lo que Dios ha puesto en nuestro camino. Él sabe por qué, él sabe cuándo, él sabe cómo.

Guadalupe Sánchez:


Yo pienso que si existiera antes que nada respeto y amor de nosotros para nosotros mismo no pasaría nada de esto. Como podemos proporcionar respeto y amor a nuestros semejantes sino, no nos lo proporcionamos a nosotros mismos. Hemos olvidado que Dios solo hay uno, son varios los nombres con que nos dirigimos a él, pero solo es UNO, y como dice el Papa “TODOS SOMOS HIJOS DE DIOS”
La humanidad está muy preocupada por ser más uno que otro, cuando lo importante no es ser más y menor que el otro, sino ayudar al otro, se han eliminado los valores en la educación familiar, pienso que en cuanto se retomen, todo ira mejor.

Les comparto una frase que me gusto y la practico


Bendice a los que te maldicen y ora por los que te calumnian.

miércoles, 20 de abril de 2016

Mensaje de reflexión: Ángeles sin alas

Los invito a leer el siguiente fragmento:

“Perfectamente detectamos a nuestros ángeles; en la calle, en la oficina, en la caseta de cobro, en el supermercado, en un estacionamiento, en cualquier lugar. He visto a los míos, a varios, durante toda mi vida. Los ángeles se comunican por todos los medios posibles. También he sabido de los ángeles de otros y he podido constatar su modus operandi. No hay misterio, simplemente están ahí en el momento preciso, enviados por alguien o atendiendo a un llamado interno; afables, pacientes, con la expresión correcta, con la palabra precisa, con una acción contundente. Los ángeles actúan sin tanto revuelo por las causas propias y ajenas, convirtiendo estas últimas en las primeras. Ahí están, trabajando silenciosamente, prudentes, incansables. Hoy saludé a uno de ellos en la esquina de mi casa y vi la espalda de otro en el estacionamiento del cine. Volver a verlos me deja siempre una muy grata sensación. Todos podemos ser ángeles quizá; sin alas” (Fabiola Torres).


De acuerdo al párrafo anterior, ¿qué se entiende por ángel? ¿Te has percatado de las acciones de tus ángeles?, ¿alguna vez has sido un ángel? Podría ser el propósito de la semana.

REFLEXIONES

Areli Sánchez:
Creo que esta reflexión hace referencia a que todas las personas tienen el potencial de hacer algo bueno, de mejorar, de ayudar al prójimo. Estoy de acuerdo con que esto es posible, pero no estoy de acuerdo con referirnos a estas personas como “ángeles”, pues da la impresión de que ese bien, sólo puede hacerlo un ser que no es humano, y no es verdad. Todos podemos hacer pequeños detalles que mejoran nuestro entorno, nuestro día, nuestra vida y las de los demás. Creo que debemos asimilar y asumir el privilegio de hacer el bien. 

Emilio Dávalos:

Muy reconfortante lo que mandas. Un ángel se llega a interpretar como un ser espiritual que su deber es servir a Dios. ¿Por qué no servir a la voluntad de Dios con los mismos ojos del creador? Es decir, tratemos a toda su creación con el amor que el le daría en cada una de las acciones. Una pelicula que me gusto mucho de angeles fue Faraway, so close de Wim Wenders y el tema principal es la interpretación de la humanidad vista atraves de los ojos de un ángel.

Rosa Ma. Arias:


Los ángeles son seres espirituales creados por Dios, inmortales, dotados de inteligencia y voluntad propia, quienes no pueden ser vistos, ni oídos, pero que a lo largo de la vida están presentes para acompañarnos, ayudarnos y protegernos, y en la muerte conducirnos a la presencia de nuestro Señor; así como, son intercesores con Dios por encontrarse cerca de Él.
Puedo afirmar que mi ángel de la guarda existe. Es un ángel custodio que está cerca de mí, es mi amigo fiel y un poderoso compañero, al que llamo cuando tengo que afrontar algún situación difícil o me siento en peligro, y que nunca me falla. Existen personas que no creen en ellos por considerarlos algo infantil, o por intangibles. Sin embargo, no se puede negar su existencia, recordemos que se mencionan en toda la Sagrada Escritura, y además, con fe, es posible sentir su presencia.  

No hay que olvidar a los ángeles “de carne y hueso” que nos rodean en el día, día. Son personas cercanas a nosotros como: alguien de la familia, un vecino, un compañero de trabajo, o gente anónima, que siempre están dispuestas a servir al prójimo sin esperar nada a cambio. Hemos sabido de muchas historias en donde aparece alguien que ni siquiera conocemos y que de manera desinteresada ayuda generosamente y comparte sus alegrías y penas además de los dones que Dios le dio.      

Luis Manuel González:


No hay duda, he tenido la fortuna de tener varios ángeles, y ser yo mismo un conducto de ellos. Puedo decir que no siempre se manifiestan como algo que agradecemos al instante, a veces parecen obstáculos con los que nos desesperamos o molestamos, pero pasado un poco de tiempo, las cosas se acomodan y entendemos la razón de todo. Y cuando esto pasa no hay más que darle gracias a Dios y seguir adelante y tratar de ser una mejor persona que el día anterior.


Agradezco a mis ángeles por ayudarme a llegar a donde estoy ahora, y pido la gracia para ser una vez más el ángel de alguien, y para esto no necesitamos ser héroes, a veces basta con dedicarles un poco de nuestro tiempo y una sonrisa.

Jocelyn Hernández:


Para mí, un ángel sin alas es la persona que llega en el momento preciso, a satisfacer una necesidad mía, corporal, pero sobretodo espiritual. A veces incluso sin que se los haya pedido o detectado en mi esa necesidad.
A lo largo de mi vida he experimentado la presencia de ángeles, empezando por mis padres. Su amor incondicional, apoyo y consejos me siguen acompañando día a día. Mi hermana, ha sido otro de mis ángeles, me ha escuchado, abrazado, impulsado, amado incondicionalmente. Mis amigos de la infancia, los de la oficina, los nuevos y los viejos J Cada uno me ha marcado y me regalan sonrisas, escucha, abrazos, cariño. Incluso personas que no conozco o de quien ni recuerdo el nombre porque sólo las he visto una vez en la vida.
Y por otro lado, también considero que yo he sido un ángel sin alas para otras personas. Mi cariño demostrado en detalles, en escucha, en alegría y empatía, creo que ha abrazado a más de uno en esta vida.
¡Me encanta seguir conociendo ángeles y ser un ángel para los demás!

Maru Hernández:


Te comento que yo siempre he sentido la presencia de mi o mis ángeles y también creo que muchas de las personas que nos rodean se convierten en ángeles en algún momento, por ejemplo, cuando hablan bien de nosotros en otro lado…
Me gusta siempre agradecer por los favores que me hacen y que estoy convencida de que son mis ángeles los que me ayudan. Me gustaría también compartir una anécdota: un día que me metí a la autopista y se me olvidó el dinero… me paré ante la caseta a pensar cómo iba a resolver eso y se paró un auto, bajó una chica se acercó a mi ventana (estaba lloviendo) y me dijo: “¿no tienes para pagar? Toma, te doy para que lo hagas, y no tienes que pagarme, solamente que cuando veas a alguien en misma situación, ayúdale.” Y luego, me dio un billete, se volteó, se subió a su coche y se fue. ¿Qué tal?
Bueno, y como siempre andamos llenos de información por todos lados, me gustaría compartir este link con un artículo muy sencillito que explica lo de nuestros ángeles católicos.


http://es.catholic.net/op/articulos/2837/cat/18/los-angeles.html


Vicky Franco:

Sin lugar a dudas en el momento menos esperado tienes la fortuna de encontrarte con algún ÁNGEL, ya sea por qué te dio una palabra de aliento en el momento preciso, por su sonrisa desinteresada, o por simplemente por estar ahí.  Siempre he pensado, que por alguna razón hay quienes están al pendiente de nosotros aun cuando no siempre los descubramos; mi hijo a veces me dice que soy demasiado servicial en asuntos que no me atañen, pero pienso, si él se encontrará en dificultades ojalá alguien le tienda la mano en ese momento de necesidad, muchísimas veces son cosas sencillas o ideas fáciles. Tendamos la mano sin importar a quién.



martes, 12 de abril de 2016

Mensaje para reflexión: Nuestro amor cotidiano: paciencia y amabilidad

El Papa Francisco publicó el pasado viernes su segunda Exhortación Apostólica. Se titula AMORIS LAETITIA, “LA ALEGRÍA DEL AMOR”.

En esta época en la que la humanidad está tan necesitada de sentir y vivir el amor, urge reflexionar y concientizar sobre la importancia de promoverlo y vivirlo sin distorsiones.

Como reflexión de esta semana, extraigo el siguiente fragmento de “La Alegría del Amor”, y destaco dos de sus características: paciencia y amabilidad.

Te invito a leer este fragmento y compartirnos: ¿cómo traduces estas manifestaciones del amor (paciencia y amabilidad) en el servicio que brindas a los usuarios o a tus compañeros de trabajo día a día? ¿Por qué es importante vigilar en todo momento nuestra paciencia y amabilidad hacia los demás? Y estas cualidades del amor, ¿cómo deben manifestarse en la familia?


¡Esperamos tus comentarios! 

90. En el así llamado himno de la caridad escrito por san Pablo, vemos algunas características del amor verdadero:
«El amor es paciente,
es servicial;
el amor no tiene envidia,
no hace alarde,
no es arrogante,
no obra con dureza,
no busca su propio interés,
no se irrita,
no lleva cuentas del mal,
no se alegra de la injusticia,
sino que goza con la verdad.
Todo lo disculpa,
todo lo cree,
todo lo espera,
todo lo soporta» (1 Co 13,4-7).
91. La primera expresión utilizada es makrothymei. La traducción no es simplemente que «todo lo soporta», porque esa idea está expresada al final del v. 7. El sentido se toma de la traducción griega del Antiguo Testamento, donde dice que Dios es «lento a la ira» (Ex 34,6; Nm 14,18). Se muestra cuando la persona no se deja llevar por los impulsos y evita agredir. Es una cualidad del Dios de la Alianza que convoca a su imitación también dentro de la vida familiar. Los textos en los que Pablo usa este término se deben leer con el trasfondo del Libro de la Sabiduría (cf. 11,23; 12,2.15-18); al mismo tiempo que se alaba la moderación de Dios para dar espacio al arrepentimiento, se insiste en su poder que se manifiesta cuando actúa con misericordia. La paciencia de Dios es ejercicio de la misericordia con el pecador y manifiesta el verdadero poder.
92. Tener paciencia no es dejar que nos maltraten continuamente, o tolerar agresiones físicas, o permitir que nos traten como objetos. El problema es cuando exigimos que las relaciones sean celestiales o que las personas sean perfectas, o cuando nos colocamos en el centro y esperamos que sólo se cumpla la propia voluntad. Entonces todo nos impacienta, todo nos lleva a reaccionar con agresividad. Si no cultivamos la paciencia, siempre tendremos excusas para responder con ira, y finalmente nos convertiremos en personas que no saben convivir, antisociales, incapaces de postergar los impulsos, y la familia se volverá un campo de batalla. Por eso, la Palabra de Dios nos exhorta: «Desterrad de vosotros la amargura, la ira, los enfados e insultos y toda la maldad» (Ef 4,31). Esta paciencia se afianza cuando reconozco que el otro también tiene derecho a vivir en esta tierra junto a mí, así como es. No importa si es un estorbo para mí, si altera mis planes, si me molesta con su modo de ser o con sus ideas, si no es todo lo que yo esperaba. El amor tiene siempre un sentido de profunda compasión que lleva a aceptar al otro como parte de este mundo, también cuando actúa de un modo diferente a lo que yo desearía.
99. Amar también es volverse amable, y allí toma sentido la palabra asjemonéi. Quiere indicar que el amor no obra con rudeza, no actúa de modo descortés, no es duro en el trato. Sus modos, sus palabras, sus gestos, son agradables y no ásperos ni rígidos. Detesta hacer sufrir a los demás. La cortesía «es una escuela de sensibilidad y desinterés», que exige a la persona «cultivar su mente y sus sentidos, aprender a sentir, hablar y, en ciertos momentos, a callar»[107]. Ser amable no es un estilo que un cristiano puede elegir o rechazar. Como parte de las exigencias irrenunciables del amor, «todo ser humano está obligado a ser afable con los que lo rodean»[108]. Cada día, «entrar en la vida del otro, incluso cuando forma parte de nuestra vida, pide la delicadeza de una actitud no invasora, que renueve la confianza y el respeto [...] El amor, cuando es más íntimo y profundo, tanto más exige el respeto de la libertad y la capacidad de esperar que el otro abra la puerta de su corazón»[109].
100. Para disponerse a un verdadero encuentro con el otro, se requiere una mirada amable puesta en él. Esto no es posible cuando reina un pesimismo que destaca defectos y errores ajenos, quizás para compensar los propios complejos. Una mirada amable permite que no nos detengamos tanto en sus límites, y así podamos tolerarlo y unirnos en un proyecto común, aunque seamos diferentes. El amor amable genera vínculos, cultiva lazos, crea nuevas redes de integración, construye una trama social firme. Así se protege a sí mismo, ya que sin sentido de pertenencia no se puede sostener una entrega por los demás, cada uno termina buscando sólo su conveniencia y la convivencia se torna imposible. Una persona antisocial cree que los demás existen para satisfacer sus necesidades, y que cuando lo hacen sólo cumplen con su deber. Por lo tanto, no hay lugar para la amabilidad del amor y su lenguaje. El que ama es capaz de decir palabras de aliento, que reconfortan, que fortalecen, que consuelan, que estimulan. Veamos, por ejemplo, algunas palabras que decía Jesús a las personas: «¡Ánimo hijo!» (Mt 9,2). «¡Qué grande es tu fe!» (Mt 15,28). «¡Levántate!» (Mc 5,41). «Vete en paz» (Lc 7,50). «No tengáis miedo» (Mt 14,27). No son palabras que humillan, que entristecen, que irritan, que desprecian. En la familia hay que aprender este lenguaje amable de Jesús.





APORTACIONES:

Emilio Dávalos:

Muy bello el primer fracmento que nos comparte. Reflexionando un poco, la paciencia es una virtud que la vemos impregnada en las sagradas escritura, desde Job hasta Jesús. Me resalto mucho una definición que lei la cual dice “La constancia valerosa que se opone al mal, y a pesar de lo que sufra el hombre no se deje dominar por él”, es tener el conocimiento de que en la vida nos vamos a encontrar muchos contratiempos, pero la sabiduria para reconocer que aun así es de una belleza infinita y vale la pena vivirla.


Humberto Vázquez: 

Yo soy de los que piensa que para amar hay que perseverar y para perseverar hay que ser pacientes.


No hay servicio si no hay amabilidad y no hay logros si no hay paciencia.

Mercedes Karam:

En esta ocasión, quiero hacer una reflexión, en cuanto al punto.” Tener paciencia no es dejar que nos maltraten”

Esto se da muchísimo, en los trabajos, familias, sociedades, muchas veces se piensa que el aguantar a una persona, ya sea compañero de trabajo, familia amigo etc. Es un signo de humildad, tener paciencia no es sólo aguantarse, y aceptar todas las injusticias del otro…. Es una oportunidad, para ayudar a esa persona, que está agrediendo, con nuestro llamado de atención, con humildad a esa persona, eso es obra de Misericordia, el corregir errores de las personas, el dar un concejo para ser mejores… pero muchas veces por miedo a muchas circunstancias, las personas preferimos quedarnos callados. Y aguantar los malos tratos de los demás ..Jesus mismo, cuando los mercaderes vendían afuera del templo, corrigió a todos, fue para un bien.. Igual nosotros no tengamos miedo, a hablar a corregir, a dar el concejo.
Aprendamos todos como compañeros de trabajo, como padres de familia, como amigos a ser amables y con mucho amor tratar a los demás, , porque todos somos iguales, seres irrepetibles y que todos tenemos derecho a ser tratados con dignidad.

Maru Hernández:



Creo que es muy enriquecedor lo que nos mandas, y una gran oportunidad para reflexionar y mejorar nuestras acciones y reacciones para con los demás.

Me gustaría compartir algunas ideas.

Cuando nos enojamos tendemos a exagerar o dramatizar,  por lo que al sentirnos así debemos tratar de tranquilizarnos para evitar decir cosas que no debemos y que pueden dañar a otros. No es tarea fácil, pero debemos trabajar para que nuestra lógica venza a nuestra ira.

Hay que tratar siempre de esperar y permitirse pensar cosas más razonables antes de dejar fluir lo primero que se nos venga a la cabeza; tenemos capacidad de hacerlo, pero nos debemos ejercitar para lograrlo.

Las personas enojadas tienden a tomar decisiones apresuradas y actuar en consecuencia, y luego se arrepienten.

Es mejor esperar antes de responder, y al menos darle una vuelta por la cabeza a las repuestas antes de emitirlas…

Hay que hacer una pausa y esperar: escuchar primero; la mayoría de la gente que se irrita es porque está frustrada, porque se siente amenazado, culpable, se siente solo o necesita reconocimiento.

Hay una técnica que sirve para evitar caer en el enojo y es que cuando alguien te esté gritando o diciendo cosas para irritarte, te imagines a esa persona en una situación chusca… PERO EVITA A TODA COSTA REIRTE, porque puede ser tomado como burla, y eso solo empeora las cosas.

Evite usar palabras como “nunca” o “siempre” para enjuiciar a alguien, esto puede resultar humillante y ofensivo.

Otra recomendación es NO UTILIZAR SARCASMOS, porque esto es otra forma de agresión.

Sí hay algunas situaciones que se sabe que resultan irritantes, hay que evitarlas o buscar alguna alternativa. Por ejemplo, si me irrita que alguien que conozco siempre llegue tarde, lo cito media hora antes.

También hay que tratar de elegir el momento para tratar los asuntos que resulten delicados, cuando la gente está cansada generalmente es más irritable, o sí tiene hambre, o no ha dormido bien.


Creo que es muy bonito lo último que nos pones en la lectura: “…El que ama es capaz de decir palabras de aliento, que reconfortan, que fortalecen, que consuelan, que estimulan. Veamos, por ejemplo, algunas palabras que decía Jesús a las personas: «¡Ánimo hijo!» (Mt 9,2). «¡Qué grande es tu fe!» (Mt 15,28). «¡Levántate!» (Mc 5,41). «Vete en paz» (Lc 7,50). «No tengáis miedo» (Mt 14,27). No son palabras que humillan, que entristecen, que irritan, que desprecian…”


Debemos trabajar en nosotros mismos todos los días por seguir este ejemplo.

Ivonne Rotzinger:



Gracias por estas actividades porque gracias a ellas si crecemos espiritualmente  aunque sea un poco en los valores . Te mando estas reflexiones que leí sobre la amabalidad y la paciencia.

UN POCO DE AMABILIDAD RINDE MUCHO La cantidad de amabilidad no guarda proporción con sus efectos. Las personas no suelen fijarse en tu esfuerzo por hacer algo por ellas. Solo perciben tu amabilidad. Lo que importa no es lo que haces, sino cómo lo haces. La acción amable más mínima vale más que la peor acción
LA AMABILIDAD ES CONTAGIOSA  Las acciones amables no acaban en ellas mismas: unas llevan a otras. El buen ejemplo cunde. Un solo gesto de amabilidad echa raíces en todas direcciones, y de las raíces salen nuevos brotes y nacen árboles nuevos. Su mayor servicio es que hace amables a los demás: suele ser más amable quien más amabilidad recibe. Esforzarte te hará más amable; a las personas con las que la practicas, si ya lo eran, les enseña a serlo aún más; y las que no lo eran, aprenden a serlo. De modo que no hay mejor obsequio que mostrarse amable: después de la gracia de Dios, es el mayor regalo.
LA PACIENCIA
Actualmente, nuestras vidas se desarrollan a un ritmo acelerado. A tal punto que todo pasa por hacer y llegar con rapidez, también para resolver nuestros asuntos personales y del trabajo, surgiendo muchas veces roces con personas que a lo mejor pudiéramos evitar.
La paciencia es el valor que nos hace como personas: tolerar, comprender, padecer y soportar los contratiempos y las advertencias con fortaleza y por ende sin lamentos; esto es posible porque uno aprende a actuar acorde a cada circunstancia, moderando las palabras y la conducta en esos momentos.

La paciencia es un rasgo de carácter que nos permite pasar por situaciones caóticas sin derrumbarnos, nos permite educar a nuestros hijos sin gritos y aceptar a los compañeros de trabajo entre muchas otras cosas.

Fabiola Torres:


La amabilidad y la paciencia, son dos características por las que sin duda recordamos a las personas. Tanto si las tienen como si no. Yo diría que son  una carta de presentación (entre otras cosas). También abren puertas como la confianza, la empatía o la amistad.


Rocío Basurto:

En éste punto, considero que lo que necesitamos es invitar a los compañeros a aplicar éstos conceptos: ser amables, coherentes y pacientes; los actos son los que dejan huella ya sean malos o buenos. Recordarles que el tener un título,  no nos hace mejores personas. Ocuparnos en mantener la armonía de nuestro lugar de trabajo evitando el sarcasmo y los malos tratos, pues esto en lugar de brindar confianza a los compañeros nos va alejando. Coherentes en el sentido en que piden respeto pero no lo dan. Dejemos de ser como los cangrejitos, apliquemos el suma y multiplica, dejemos de restar y dividir.

Judith Baez:

“Los necios dan rienda suelta  a su enojo, pero los sabios calladamente lo controlan”
Todos   en el centro de labor, centros comerciales o en nuestro hogar, hemos tenido situaciones que hacen molestarnos con facilidad y máxime cuando son malos entendidos, suposiciones, etc., sin embargo, cuando aprendes a controlar tus emociones (muy difícil pero no imposible), todo es más sencillo de digerir.
En mi caso y por experiencia propia, trato de controlar al máximo ofreciendo ese enojo a Dios y pidiéndole me dé la sabiduría suficiente para no pecar (hiriendo verbal o emocionalmente a mis semejantes).
Consejos que trato de llevar a cabo  ante una situación difícil:
Guardar silencio y retirarse
Respirar profundamente (sentir que es lo último que vamos a hacer)
“Justificar” que quien o quienes originaron tu molestia, no se sentían bien o tuvieron algún contratiempo que les irritó.
Tomar una hoja y papel y escribir todo el  malestar, no es cobardía ni traición, es comprender no estar listo para enfrentar la situación.
Salir o despejarse de la situación ayudará a enfriar la mente.
Solucionar el problema
Dar vuelta a la hoja

“No le sueltes la rienda al enojo porque es un caballo muy rebelde,
habrá situaciones donde estarás tentado a explotar, pero es tu decisión,
contrólate, se sabio, recuerda que puedes enojarte,

lo que no puedes es pecar”


Guadalupe Sánchez:


Yo creo que para dar amor a los demás primero hay que amarnos a nosotros mismos, respetar a los demás tal como queramos que nos respeten los demás. 
Para crear una sana convivencia hay que evitando los gritos, sarcasmos y sobre todo no involucrarnos en cosas que no nos atañan, eso para mí se llama “respeto”, no importa el rango o jerarquía que se tenga, siempre debe de haber respeto, tolerancia y paciencia.

Te comparto un pequeño pensamiento que me encontré y me gusto:

¡Ama!
Ama por encima de todo,
No cierres los ojos a la suciedad el mundo,
No ignores el hambre
Olvida la bomba,
Pero antes haz algo para combatirla,
Aunque no te sientas capaz.

¡Sueña!
Pero no perjudiques a nadie y
No transformes tu sueño en fuga

Sube…
Haz de los obstáculos escalones
Para aquello que quieres alcanzar.
Mas no te olvides de aquellos
Que no consiguieron subir

En la escalera de la vida

Virginia Franco:


El AMOR es realmente muy importante para incluirlo en nuestra vida diaria, debemos hacerlo un HÁBITO; actualmente la juventud es realmente muy impaciente por la misma inercia que viven, por lo que es necesario fomentar la paciencia en el hogar, para permitir que en todo nuestro alrededor se pueda permear la amabilidad y el amor, en el trabajo, en la oficina, hasta con extraños; nuestros propios conflictos personales no nos permiten SIEMPRE ser un ejemplo de paciencia y amabilidad, es otra forma de AMAR AL PRÓJIMO, darles un poco de nuestro corazón.

jueves, 7 de abril de 2016

Actividad de la semana: "Tómate una selfie. Compártenos un momento de servicio”

La actividad de esta semana lleva por título “Tómate una selfie. Compártenos un momento de servicio”. Esta es una propuesta de la Dirección de Servicios Tecnológicos dentro de nuestro Programa de Crecimiento Espiritual.

La espiritualidad está viva y se alimenta de cada momento en el que estamos presentes. Somos personas que buscan trascender mediante el servicio, alimentando de esta forma nuestra espiritualidad y la de la persona que hemos ayudado con nuestro esfuerzo y trabajo. Por tanto, como áreas de servicio que somos y siendo nuestro trabajo una oportunidad para manifestar nuestra espiritualidad, los invitamos a captar en una fotografía un momento de servicio, evidenciando quién eres, lo que haces y a quién apoyas.

Esta actividad propone que te tomes una selfie con una persona a la que hayas brindado un servicio en el transcurso de la semana, y nos la envíes por este medio. ¡Captura un momento de tu trabajo diario y compártelo! Haz participes a tus usuarios de nuestro programa de crecimiento, ya sean alumnos, profesores o administrativos.


Aportaciones

Betz de Auditoría Institucional, atendiendo al Dr. Israel Martínez de la Facultad de Ciencias de la Salud en un tema vinculado con materias de Internado Médico.


Humberto y Ramón con su proveedor de telefonía afinando servicios institucionales...



Juan Jacobo con sus usuarios de la VFI. Se configuró su cuenta de correo, instalación de Office, Adobe Cs6 Mc, migración de información de su equipo Pc a Mac.



Angie con dos personas que se acercaron a preguntar por el área de Atención Preuniversitaria, ya que se encontraban desorientadas. Angie se dio a la tarea de darles la información que solicitaban, y nos comparte que la señora le agradeció con una sonrisa el haberle apoyado, y accedió a tomarse la foto. Le dijo a Angie que era una persona amable y servicial.  

¡Esto es lo que debe distinguir nuestro trabajo! ¡Lo que hacemos habla de nosotros y de nuestra Universidad!


Luis Miguel con un usuario de Diseño a quien se brindó mantenimiento de equipo.


Miguel Ángel ayudando a los que no pueden imprimir...



Equipo de Evaluación Institucional en un momento de trabajo... (Haydeé, Maru y LuisMa).


La selfie de Juan Carlos (se resiste a voltear):


Selfie del equipo de auditoría ayudando a la Coordinadora de posgrado de la Facultad de Psicología, para  la entrega de su documentación de fin de cursos:


Una evidencia del cumplimiento en tiempo y forma de la Facultad de Derecho . “Programas de Posgrado.”



Uno, dos, tres por Roberto Carlos y todos sus usuarios. Maricarmen en la segunda fotografía. :)



                               

Uziel con sus compañeros Víctor, Javier y Jacobo del módulo de biblioteca, porque el servicio también se brinda dentro del área, señala:




Víctor Eduardo apoyando a una usuaria con un reporte de correo:



Katy e Iván con la "actitud y calidad en el servicio", atienden a una alumna de licenciatura:


El equipo de Sistemas (Emilio, Isa y Mariana), después de una reunión de trabajo con una usuaria:



Areli y Maru, coordinándose para decidir qué documentos hay que traducir:


Omar apoyando a una usuaria para resolver problemas de visualización de calendarios en O365 (la foto se resiste a voltear):





Siempre trabajando para que las metas de los alumnos se plasmen en papel en su graduación… Certificación, titulación y Servicios Escolares.

Adriana, Mercedes Lourdes, Amelia, Tere, Roci, José Manuel...



José Manuel, Edith y...


Delia entregando una constancia solicitada, en tiempo y forma:


Sagui dando asesoría a usuario de como  insertar una firma de como Outlook:



"En el “nuevo” archivo y todo(a)s colaboramos para que la actividad saliera en tiempo y forma, es decir el servicio de la ayuda al prójimo en el área es parte del día a día…":

Juan Martín, Guadalupe, Roci y Maru...



Lulú brindando atención y calidad en el servicio, a un Profesor de Fotografía:





¡Gracias por compartirnos un momento de servicio!